martes, 6 de octubre de 2015

Un mito falso.

   Vamos a ser muy directos. Beber cerveza NO engorda. Seguramente pienses que estamos equivocados, pues no. Si tu miras los ingredientes de la cerveza normalmente lleva: agua, lúpulo, cebada y levadura. Algunos cervezas están hechas de arroz o llevan otros ingredientes. También hay cervezas especiales con ingredientes que las caracterizan como calabaza, agua de mar, etc. En cualquier caso y siempre que no sea una aberración de cerveza está hecha con ingredientes 100% naturales con muy pocas grasas. Además en la fermentación se consumen los azúcares. Como consecuencia una cerveza tiene muy pocas calorías.


   A pesar de esto el tópico de la barriga cervecera está muy extendido, pero si una cerveza tiene tan pocas calorías, ¿cómo engorda? Fácil, simplemente no lo hace. Son otros hábitos y alimentos los que provocan que el sujeto engorde. Normalmente esta designación va dirigida a los habituales de bares y, como hay cerveza en todos ellos, se culpa a esta de la barriga rellenita que van ganando con el tiempo, nada más alejado de la realidad.

   Cuando el ciente habitual va a un bar, ya sea con los amigos a pasar el día o a ver un partido de fútbol, es muy normal que se pida una cervecita. La trampa está en que nunca se la pide sola. Para no ingerir alcohol con el estómago vacío se suele acompañar de una tapita a un muy buen precio y en general muy buenas. El problema de esto es que la calidad de la misma es muy baja, suelen ser bravas, calamares o similares que, en todos los casos, es comida frita.


   No hace falta decir que la fritanga es la comida más insana del mundo. No solo lleva salsas hipercalóricas, como las bravas, además está frito en aceite de dudosa calidad y además reutilizado. Todo esto convierte a las típicas tapas de bar en comida muy poco recomendable. Casi podríamos decir que es comida basura, pero esto solo en casos muy contados. Son estas tapas y NO la cerveza lo que provoca que los clientes ganen diámetro con el tiempo. Pero claro, cerveza hay en todos los bares y tapas ya depende del sitio, ¿será este el motivo del falso mito?


   Ahora queremos saber que opinas de este mito que hemos desmentido. ¡Cuál dirías que es su origen? Te animamos a opinar en los comentarios justo debajo del blog y a que selecciones una de las opciones para indicar si te ha gustado mucho o nada el artículo.

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